No tengo supremacía en lo metafísico,
Quizás por mi objetividad me envuelvo en el realismo.
Soy aquel joven tirano, que peregrina en el desierto,
Soy aquel diamante negro que
Naufraga en el mar, lo más profundo..
No soy aquel que persigue cándido sus sueños,
Ni de los que meditan frente a un espejo.
La misa tan solo para los que llenan su silencio,
Quizás no he hecho siempre lo correcto,
Pero nunca me he golpeado el pecho.
Si existe un Dios, que me perdone,
Por no llevar la vida que me ha predispuesto;
La fe para los que buscan llenar su vacío,
Y si hoy aparento algo resentido,
Motivos he de encontrar en su Santa Iglesia,
Ya que si amor os ha brindado,
Odio, os ha brindado, con el Diablo.
No hay un Génesis más probable,
Cual en tu corazón nunca se ha ofuscado,
No hay Apocalípsis más creíble
Cual en tu mente no se haya desarrollado.
No existe una Biblia, para los que
Desprecian el dolor del prójimo,
No hay un Padre Nuestro para los que
Pregonan ser humildes o bienaventurados.
No existe el Cielo, para los que
Buscan sus pasos en el suelo..